martes, 7 de febrero de 2012

PESADILLA!!!!

El sufrimiento de uno no se compara con la paz para todos.
Se nos acaba de confirmar lo que hace unos meses temíamos la invasión viene y con gran fuerza. Nuestra ciudad fue de las primeras en apoyar el levantamiento que derroco el antiguo régimen este apoyaba al imperio. El nuevo estado se levanto con la motivación de alcanzar una independencia tanto ideológica como económica. Los antiguos empresarios y políticos fueron juzgados a muerte en castigo de sus obras pero sobre todo por el daño hecho a la nación. Fue una guerra fulminante donde ni el apoyo armado por parte del imperio que hoy nos amenaza pudo hacernos retroceder. Una explosión en cada ciudad y poblado redujo la fuerza del estado militarizado neoliberal en una semana.

Como siempre este deseó negociar privilegios de escape con los revolucionarios llegados al poder, sus tumbas fueron monumentos mismos de la caída. Pasaron dos años de una renovación económica. En los que por primera vez en mi vida el poder industrial comenzaba a trabajar por el bien nacional. Las reformas a la constitución no hicieron que se nacionalizara ninguna industria de inmediato pero si apretó tanto las industrias controladas por intereses capitalistas que cerraron o las mal vendieron por fin al estado.

Al principio como dije el imperio si bien preocupado con tal de mantener activos los acuerdos del paso no intervino. Las amenazas comenzaron cuando la gran asamblea general se negó a renegociar.Fue entonces cuando un comando intento asesinar al que se creía era la pieza más importante del nuevo estado. Más adelante un bloqueo por mar, y otro por el aire. Sin respiro el nuevo gobierno junto con más educado de nuestra sociedad rápido encontraron maneras de contra restar estos ataques. Pero después de que el imperio se negara ha escuchar a las otras partes involucradas, el ataque se cree que comenzara primero desde el cielo, después la artillería y por último la invasión a pie.

Previniendo esto cada mujer y hombre en capacidad de pelear se nos dio un entrenamiento básico junto con un rifle y munición. Los niños fueron trasladados a albergues y búnkers esperando salvar al mayor número de vidas. Mi familia compuesta por mi compañera de vida dos niños. Se vio como todas las demás fracturada; nosotros como muchos otros nos habíamos levantado a pelear. No por la amenaza de ahora sino por la que siempre vivimos pero más importante en la que crecimos. Ya es de noche se escuchan los aviones con sus cargas de muerte iluminando la noche, la tierra tiembla ante la destrucción pagada. No es Washinton quien habla pero si Wall Street quien paga. Toda la noche las casas se cimbran al camino de muerte pero es muy difícil abandonar la libertad cuando sea probado.

En la mañana comenzó la entrada por tierra cada casa, calle, colonia y ciudad estaba dispuesta a pelear a morir. Así comenzó nuestra segunda guerra en la vida que de algún modo se sentía como si nunca hubiéramos estado en paz. Parapetados en casa peleamos, con todo después de una semana lo habíamos frenado lo suficiente como para que nos llegaran municiones. Sabíamos como tantos otros que nuestra victoria es que no nos puedan ganar. Pero el imperio no pararía.

Su avance aunque frenado no lo detuvimos. Cada día eran más y más hasta que una noche las acciones en tierra e apoyaron con las aéreas. Esa es ésta, hoy aquí en mi casa con ella estamos esperando a escuchar cuando vengan a querer sacarnos. Toda la noche en guardia ella en el techo yo en la venta nuestra conexión un radio. Al norte al principio de la calle comienza escucharse el combate la casa de la cuadra de atrás sufre un ataque con bomba directo. la noche se vuelve naranja. El ruido de disparo constante y violento. subo al techo veo que casi todos nuestros vecinos lo están retrocediendo peleando como uno. Más casas se incendian la lucha continua cuando bajo por munición. Un grupo de soldados invasores intentan forzar la puerta disparo sabiendo que nuestra calle está perdida. Subo las escaleras para esperarlos sin dejar de disparar, me despido de mi amada, comenzamos a pelear juntos. La guerra comenzaba a quitarnos la casa, pero no nuestras esperanza el sol comenzaba a brillar con esto el ejercito enemigo perdía su ventaja. Bajamos las escaleras para descubrir que siguen ahí dos. Una bala me arrebata mi sueño comienzo a pelear paranoico.

Mal herido comienzo a recorrer lo que queda de nuestra casa en llamas, escucho la radio de los soldados muertos. Se escucha claro que se retiren que la zona va a ser neutralizada. Subo corriendo los cuerpos de l@s vecin@s adornan las azoteas. A dos casas hacia el norte veo a un hombre subiendo igual a la azotea lleva un rifle plateado y el mismo tatuaje en la mano que yo. Levanta la cabeza soy yo sus ropas son blancas me grita -ya viene el fuego pronto la vas a ver.- sonríe. Levanto la vista y veo primero una formación de cazas F-22 soltando todo lo que tienen atrás una flota de B-2. El hombre sigue sonriendo, disparando su rifle al aire con una mano la otra extendida. Todo se vuelve fuego en segundos grito con todo mi corazón... Todo es fuego.

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